Sharon era una mujer entrada en edad y un poco más en carnes. Pero cumplía con creces ese tópico de que los rellenos son más felices y así lo hacía saber. Sin duda era una persona encantadora, acorde al tamaño de su maletín de pinturas y pinceles, porque Sharon era maquilladora profesional. En una sala privada del mejor hotel del Shojo de Londres estábamos esperando a Nikki Sixx junto a nórdicos, alemanes, franceses y por supuesto británicos.
El director del hotel me preguntó que necesitaba y recalcó por encima de todo que no me cargara ninguna obra de arte que colgaba de la pared al poner mi fondo. El resto de europeos me miraban en silencio, sin decir nada, hablando entre ellos por qué nosotros íbamos a hacer fotos y ellos solo una entrevista en audio.
Carlos es un gran dibujante, pero es de esas personas introvertidas que hablan poco, que se sumergen en sus pensamientos y solo hace falta que le pase una tontería para dispararse hacia el cachondeo. Un tipo de esos que el mismo Glenn Hughes es capaz de decirle que es el tipo que habla el inglés más perfecto con el que ha hablado y que en aquella época hacíamos un tándem casi perfecto para los menesteres de la prensa del rock y que aún hoy sigo echando de menos. Pues bien, su cámara de video fue a parar a una taza, o más bien a un barreño de café con leche. Y aquello desató unas risas a las que evidentemente nadie se unió excepto Sharon. Y como una cosa trae a la otra, Sharon nos empezó a explicar que llevaba desde los 70’s maquillando a estrellas de rock. Nos contó historias de Jimmy Page, de Def Leppard hasta que vi en su maletín escrito “SHARON FITZPATRIK”. Puede sonar extraño, pero con mi ingles de estructura Sioux y acento Apache le dije que su apellido me traía muchos recuerdos de uno de mis alumnos en España. “MARK FITZPATRICK, un niño grande, casi albino, 11 años, en una escuela de pueblo de Valencia?”. Joder, resultó ser la tía del niño en cuestión. ¿Qué probabilidades tenía de encontrarme la tía de Fitzpatrick en Londres mientras esperaba a Nikki?”.
Llevábamos horas de espera en ese hall de hotel. No me cabía más café en el cuerpo y a Carlos le empezaba a salir a borbotones el café con leche cada vez que respiraba. Se hizo eterno, hasta que llegó mister SIXX y aquella enorme sala privada se llenó por completo con su carisma.
Recuerdo que pensé ¿Pero que pequeño es? y en cierta manera lo era. Nikki siempre fue mi CRUE favorito y seguramente la personalidad que hizo que me interesara de alguna manera por MOTLEY CRUE pero sin sus plataformas y pinturas de guerra se me transformó en humano en un segundo. Una entrevista tras otra y nosotros para el final. Bastante hartos de aquello Nikki cambió el protocolo y dijo “primero las fotos y luego la entrevista”. Y así fue. Diez minutos de maquillaje, y lo tenía delante de mi objetivo mirándome con una sonrisa infantil.
Aquello empezaba a ser desastroso, no tenía al demonio de Los Angeles ante mi, más bien parecía el jodido Pluto de Disneyworld y había que cambiarlo. Nikki ha muerto clínicamente dos veces por las drogas, ha vivido ahogado en alcohol toda su vida, y siempre ha tenido esa sonrisa oculta desafiando al mismísimo Dios. No me valía el fondo negro, no me valía su expresión, no me valía nada y todo empezaba a derrumbarse a mis pies. Entonces le dije “te importa que cambiemos de escenario” y me dijo lo que no me ha dicho casi nadie. “Es tu trabajo, tu idea, tu mandas”.
Apoyado en su habitat natural, la barra del bar. Dándole la espalda a lo que siempre lo consumió, lo que le creó una salvaje fama de rock star típico americano, pero abrazándose a la vida, con esa triste sonrisa recordando en sus brazos la historia de su vida inyectada a tinta.
Nikki aprobó todas las fotos, pero en especial esta que nunca se usó y guardé con recelo. Quizás, no sé, de todas, fue la que más me transmitió la vida de una gran rock star con demasiada experiencia y años a sus espaldas en este negocio. Su mirada triste, su sonrisa camuflada, su traje de rayas y su pelo característico no hizo más que hacerme pensar que al final estuve con uno de mis HERO IN LONDON.